No es lo mismo un pie bonito que un pie sano
La quiropodia es el tratamiento médico que sólo un podólogo puede realizar para curar las enfermedades del pie, tratar el dolor que nos impide caminar con normalidad y detectar otras patologías como la fascitis plantar, juanetes, dedos en martillo o en garra, pie diabético, etc.
Una sesión de quiropodia puede incluir el limado y corte de uñas terapéutico, el fresado de talones agrietados, la deslaminación de durezas, helomas y tratamientos para los hongos de los pies y en las uñas, papilomas, uñas encarnadas, etc.
Mientras que la pedicura en un salón de belleza es un procedimiento únicamente estético que mejora el aspecto de los pies y las uñas de manera superficial.
¿Duele la Quiropodia?
La quiropodia es indolora y efectiva, pero si el paciente siente algún dolor, el podólogo está capacitado para aplicar anestesia local, y si se diera el caso de infección, también esta facultado para recetar medicamentos.
La eliminación por ejemplo de un callo doloroso (heloma) puede producir alguna ligera molestia, pero es un dolor mínimo que se puede aguantar ya que la intervención dura muy poco tiempo.
Es importante que las dolencias del pie se traten cuanto antes y acudas al menos una vez al año al podólogo para evitar cualquier complicación y prevenir lesiones.